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20/10/04 19:54-Casa.

Noticias

Medio Ambiente:

Durante este verano venimos observando mis amigos ciclistas de montaña que el camino que conecta el paraje conocido como "Las Escarihuelas" al oeste del campo de tiro del Roldán (Cartagena) con la rambla del Portús, está siendo pasto de un salvaje ensanchamiento por medio de maquinaria pesada para adecuar el acceso a una serie de edificaciones (suponemos que con sus respectivos permisos y licencias) que disfrutan de la bonita estampa de La Muela y El Portús. Para colmo, el otro camino que sube a la pinada desde el mismo paraje de "Las Escarihuelas", ha sido cortado por alguien sin identificar ayudado del mismo tipo de maquinaria pesada en dos puntos distintos por medio de un pequeño muro de piedras y tierra. Para colmo, el camino que llevaba a la misma pinada por la cresta de la ladera, ha sido cortado (haciendo caso omiso de la centenaria servidumbre de paso) con una valla metálica que limita una propiedad a todas luces legal. Afortunadamente y gracias al paso continuado de otros caminantes amantes de la zona y de nosotros mismos, ha terminado por crearse un camino paralelo a la valla. Entendemos (pero en absoluto justificamos) que alguien cansado de que le obliguen a tirarse por enmedio del monte, existiendo caminos desde hace docenas de años haya arrancado parte de la valla y tirado algunos de los postes metálicos que la sujetan. Todo esto es una muestra más de que si hay que "meter mano" al monte, se le mete, si hay que tirar, se tira y si hay que quemar, se quema. Y por supuesto, nunca están las autoridades municipales al tanto de lo que sucede a diez kilómetros del centro de Cartagena. Es que es para estar bastante cabreado.